China endurece sus restricciones anticovid

Como venimos informando en nuestros envíos, China endureció esta semana las restricciones sanitarias tras la llegada de la variante Ómicron del COVID-19 a su territorio y el aumento de contagios en los últimos días. Estas medidas involucran a las importantes ciudades de Ningbo, Shaoxing y Hangzhou y se toman en línea con la política de tolerancia cero contra el coronavirus tomada por China desde marzo de 2020. Más de 50.000 habitantes de la provincia entraron en cuarentena mientras que otros 500.000 están bajo vigilancia, mientras que algunos vuelos domésticos han sido suspendidos. Varias empresas suspendieron sus operaciones en esta región, por lo que parte de la producción de bienes, desde baterías y ropa hasta tintes textiles y plásticos, quedó detenida. Todo esto por órdenes del gobierno local. La amenaza de la variante Ómicron se instala justo cuando la movilización de contenedores de China ascendió a 12.870 millones de toneladas en los primeros 10 meses del año. Lo que representa un aumento del 7,8% interanual. Durante el período, la producción de contenedores alcanzó los 235 millones de TEUs, aumentando un 8,4% con respecto al año anterior.

Ante la llegada de Ómicron y con el propósito de garantizar la libertad de circulación de los trabajadores del transporte internacional, el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Ghebreyesus, y el director general de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Guy Ryder, confirmaron que sus organizaciones formarán un Grupo de Acción «con carácter de urgencia» con los principales organismos de transporte. El compromiso se produjo después de que las organizaciones y los sindicatos que representan a las empresas de transporte por carretera, aéreo y marítimo y a los trabajadores de dichos sectores advirtieran del impacto de las nuevas restricciones de viaje en los trabajadores del transporte y en la fragilidad de la cadena de suministro mundial ante la variante Ómicron. Se celebrarán reuniones periódicas con la IATA, la ICS, la ITF y la IRU. Otras áreas de interés incluirán la modificación de la Tarjeta Amarilla, un pasaporte médico emitido por la OMS, para que sea utilizado por los trabajadores del transporte como prueba de vacunación. 

Por otra parte en España, tanto la Confederación Española de Transporte de Mercancías -CETM- como la Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España -Fenadismer-, han puesto a los camiones a recorrer las principales ciudades españolas, protestando de este modo por la complicada situación del sector, y alentando la idea de realizar un paro de sus actividades previo a Navidad y Año Nuevo. Apenas horas luego de que se supiera que 8 de cada 10 transportistas secundarán el paro patronal programado para los días lunes, martes y miércoles 20, 21, y 22 de diciembre próximos, dos de los más relevantes entes que reúnen a los conductores han vuelto a expresar su malestar, algo que quedó evidenciado en las calles de las grandes urbes del país, con la “marcha lenta” de los vehículos. En Reino Unido se vive una situación similar, una crisis de mano de obra y de transportistas. La demanda de 100.000 camioneros, buena parte de los cuales se marcharon por el Brexit y la pandemia, provocó una crisis de suministro de gasolina el pasado mes de septiembre y también de suministro de productos en los supermercados. Johnson decidió implantar una serie de medidas para agilizar la situación. Una de ellas fue relajar el estricto sistema de inmigración post-Brexit y dar visas temporales de tres meses a 5.000 transportistas comunitarios y también a 5.500 trabajadores para el sector aviario para garantizar que habrá suficientes pavos, el plato típico navideño de los británicos para estas fiestas. Otra medida fue desplegar el Ejército. El tren se está convirtiendo en la alternativa principal a los problemas del transporte.Se han puesto en marcha los “jumbo trenes” o trenes gigantes para transportar material de construcción por ejemplo. Sin embargo, pese a todos los esfuerzos, han advertido que aún no se han satisfecho las demandas para toda la temporada navideña. 

En EE. UU. aumentó la actividad de carga en el puerto de Oakland luego de dos meses consecutivos de disminución de las importaciones. El puerto atribuyó la recuperación al tráfico de buques adicionales, llegando a 75 embarcaciones en noviembre, la mayor cantidad en seis meses. Las líneas navieras están restaurando servicios a Oakland luego de las cancelaciones de mediados de año, llegando a rentar sus propios buques en noviembre para sus arribos. Los buques pasaron por alto Oakland a principios de año debido a retrasos excesivos en Los Ángeles y Long Beach, estos puertos están enfrentando un nuevo problema y es que una buena parte de los barcos que ahora llegan al puerto son barcos más pequeños. Muchos fabricantes y empresas de transporte marítimo han recurrido a estos buques más pequeños como una forma de evitar tiempos de espera para el espacio de contenedores en buques más grandes. Eso podría acelerar el tránsito, pero los barcos más pequeños son menos eficientes para que los puertos descarguen y manejen. Los barcos se encuentran dispersos en el mar, debido a los nuevos sistemas de colas implementados el mes pasado para mitigar el riesgo de colisiones en aguas invernales. Los barcos se extienden a lo largo de 1,000 millas de costa desde California hasta México. Los mantendremos informados.

Por otro lado, en Chile, en el marco de la licitación del Terminal 2 de Valparaíso liderada por la Empresa Portuaria de Valparaíso, AGUNSA presentó la mejor oferta para adjudicarse la operación del terminal por los próximos cuatro años. AGUNSA tiene una larga experiencia en el sector portuario, operando en terminales multipropósito, graneleros y de contenedores tanto en Chile como en el extranjero (Argentina, Colombia, Ecuador, Uruguay y Estados Unidos) donde destaca su experiencia en el manejo de acero, carga rodante y carga general. El nuevo operador del Espigón asumirá la concesión a partir del 16 de marzo de 2022, cuando la empresa Terminal Cerros de Valparaíso (TCVAL) finalice en forma anticipada su periodo al frente del terminal. De esta forma, Agunsa mantendrá la operación del Terminal 2 hasta marzo del año 2026.

Finalizando, según venimos observando los puertos continuarán luchando con los problemas de congestión durante algún tiempo, las interrupciones de la cadena logística seguirán en el 2022. La llegada de la variante Ómicron pone en jaque nuevamente a la industria que deberá tomar decisiones para no acentuar aún más los problemas de este año. Se vienen tiempos desafiantes, no duden en consultarnos para encontrar juntos soluciones. ¡Estamos para ayudarlos!

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