China: nuevos brotes hacen peligrar la apertura
El domingo 15 de mayo, las autoridades chinas señalaron que la ciudad de Shanghái comenzaría a permitir que los negocios abran de forma limitada a partir del lunes 16 de mayo pasado, ya que los casos diarios de infección por COVID-19 continúan disminuyendo casi dos meses después de un cierre estricto que afectó a sus 25 millones de habitantes. Sin embargo, con anterioridad se confirmó el retiro de la Confederación Asiática de Fútbol de la organización del torneo de fútbol de la Copa Asiática, originalmente programado para el verano septentrional de 2023, lo que ha sido interpretado ampliamente como una señal de que cualquier sentido de vuelta a la normalidad en Shanghái o en toda China se ha pospuesto lejos en el futuro. Los suministros de fabricantes en China de firmas como Adidas hasta fabricantes de automóviles, desde Toyota hasta Tesla, enfrentan costos y obstáculos de producción «sin precedentes», mientras Sony se ingenia para manufacturar suficientes PlayStations. Sin embargo, el impacto sobre las cadenas de suministro no está afectando sólo a las multinacionales. Existen reportes de hospitales de EE.UU. y de Australia que enfrentan escasez de productos químicos utilizados en los rayos X, mientras que los proyectos inmobiliarios se ven retrasados por los insumos retrasados. Cuando finalmente ocurra la apertura, las exportaciones retrasadas se abrirán paso en la cadena de suministro. Algunos analistas del mercado esperan un aumento en las colas de buques que esperan por un sitio de atraque, sobre todo, en los puertos de EE.UU. Según las proyecciones, las condiciones extremas de congestión se volverán a apreciar en el segundo semestre, ya que la ola de carga retrasada de China coincide con los flujos tradicionales de temporada alta. Ya en 2023, la situación podría cambiar dramáticamente para las líneas navieras, debido a una gran ola de nuevos portacontenedores que ingresarán al agua.
Por otro lado, en EE. UU., según el director ejecutivo del puerto de Los Ángeles, Gene Seroka, no hay signos inminentes de una desaceleración en la demanda de los consumidores estadounidenses a juzgar por la cantidad de contenedores de envío que pasan por el puerto. La carga marítima que fluye a través de los puertos más activos del país desde China parece constante a pesar de los bloqueos en la nación asiática. El enfoque de tolerancia cero de China hacia el Covid ha dejado inactivas fábricas y almacenes, ha ralentizado las entregas de camiones y ha empeorado los atascos de contenedores. Aún así, las mercancías siguen moviéndose. En un aviso, Maersk dijo que espera que los movimientos de camiones hacia y desde Shanghái “mejoren gradualmente con una tendencia a la baja de las nuevas infecciones de Covid” en la ciudad. El transporte de carga «está encontrando su camino hacia el puerto de aguas profundas de Yangshan y, si no, bajará al puerto vecino de Ningbo, que ha subido un 25% en los últimos dos meses», dijo el jefe del puerto de Los Ángeles. “Estamos observando día y noche, pero hasta ahora, los flujos de carga parecen ser muy consistentes”. En el cercano puerto de Long Beach, el director ejecutivo Mario Cordero comparte ese sentimiento. “La carga continúa moviéndose a un ritmo récord y es posible que no disminuya la velocidad en el corto plazo”, dijo en un comunicado de prensa el viernes cuando el puerto número 2 de EE. UU. anunció su abril más activo registrado. “Nos estamos preparando para un probable aumento en el verano”.
Mientras tanto, Mykola Solsky, Ministro de Política Agraria y Alimentación de Ucrania, y Thomas James Vilsack, Secretario de Agricultura de EE.UU., discutieron una asociación para aumentar las exportaciones de granos de Ucrania. “Durante la reunión, las partes discutieron la asociación para aumentar las exportaciones de granos de Ucrania y las oportunidades para apoyar a los agricultores ucranianos”, señaló el ministerio ucraniano. Además, Solsky y Vilsack hablaron sobre la posibilidad de establecer una organización de los principales proveedores de granos del mundo para la seguridad alimentaria mundial. Está previsto que la organización coordine la demanda y la capacidad de producción de granos y promueva el libre comercio. Según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), a principios de mayo, alrededor de 25 millones de toneladas de cereales estaban atrapadas en Ucrania porque no se podían exportar debido al bloqueo de los puertos marítimos por parte de Rusia y problemas de infraestructura. La ONU ha declarado en repetidas ocasiones el riesgo de hambruna debido al bloqueo de las exportaciones de alimentos de Ucrania.
Por otra parte, en Chile, el Subsecretario de Relaciones Económicas Internacionales, José Miguel Ahumada y el Viceministro de Comercio, Exterior Daniel Legarda, anunciaron la entrada en vigor del Acuerdo de Integración Comercial ACE 75 entre la República del Ecuador y la República de Chile, suscrito con el interés de modernizar y profundizar la relación bilateral ya existente. El acuerdo, que cuenta con un total de 24 Capítulos, incorpora estándares adicionales en facilitación de comercio, aspectos regulatorios, servicios, comercio electrónico, entre otras. Además, en base a lo informado por la Subsecretaría de Relaciones Económicas Internacionales (Subrei), añade nuevas materias con “un enfoque inclusivo tales como género, micro, pequeñas y medianas empresas, medio ambiente, asuntos laborales y cadenas de regionales y globales de valor y encadenamientos productivos, llevando de esta manera la relación bilateral al nivel más profundo de la integración”, Asimismo, se enfatizó en que ambos países avancen en la liberalización comercial. En otro orden de cosas según un informe de Aduanas, el comercio exterior chileno ha dado señales de desaceleración en las últimas semanas, y lo que ocurre con China, el principal socio comercial nacional, no queda ajeno. El intercambio bilateral sumó US$ 5.383,7 millones en abril, lo que refleja un alza de 21,5% frente al mismo mes del año pasado. Pero, al hacer zoom, se evidencian ciertas mermas, por ejemplo, en las exportaciones no cobre. Esta baja se dio en medio del cierre que han impuesto las autoridades chinas como parte de su política “Covid Cero”, pero se enmarca en un cuadro en que los envíos nacionales hacia la segunda economía del mundo mejoraron un 25,5% el mes pasado -totalizando US$ 3.837,4 millones-, impulsados por el repunte de 33,1% de los bienes mineros, responsables del 88,9% de lo exportado al país en abril.En conclusión, los puertos de todo el mundo siguen aún lidiando con la congestión a medida que la política cero Covid de China aumenta la presión sobre las cadenas de suministro. Cuenten con nosotros para acompañarlos y encontrar soluciones para sus embarques en este escenario desafiante.
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