Cierres en China por variante Ómicron
La estricta política de cero Covid de China impuso un nuevo bloqueo parcial en Ningbo. Al detectarse casos positivos en el distrito Zhenhai, provocaron la imposición de una gestión de «circuito cerrado», según los medios locales. Hasta ahora no ha habido ningún impacto en las cadenas de suministro, pero con cierres aislados similares dentro del delta del río Yangtze, incluso en Shanghai, algunos transportistas de la región se están preparando para una interrupción. El peor resultado sería un bloqueo en toda la ciudad de Ningbo, lo que provocaría la parálisis de la industria logística y las terminales. Cualquier bloqueo parcial de las terminales de contenedores podría traer una repetición de la interrupción del envío experimentada a principios de este año, que incluyó el cierre de una de las terminales de Ningbo en agosto y el incidente más grave cuando Yantian suspendió las operaciones de exportación en mayo. La política de cero Covid de China sigue causando estragos en los cambios en la tripulación de la embarcación, lo que ha creado una escasez de capacidad de alimentación en el ajetreado período previo al Año Nuevo chino el 1 de febrero. La llegada de la variante Omicron se ha sumado a la incertidumbre de la cadena de suministro, ya que el gasto continuo en bienes sobre servicios ayuda a mantener elevadas las tarifas de flete desde China. Los mantendremos informados.
Por otro lado, Vietnam y otros países como Tailandia, han abandonado las agresivas estrategias de contención del Covid-19 para impulsar sus economías. Este cambio se ha visto favorecido por el rápido aumento de las vacunaciones. No obstante, economistas y empresarios se muestran cautos, ya que los científicos todavía están estudiando la nueva variante Ómicron, incluyendo su contagio y virulencia. La nueva variante llega en un momento en el que las condiciones de la cadena de suministro mundial están mejorando, pero aún se enfrentan a desafíos. Aunque las fábricas llevan meses reabiertas en todo el sudeste asiático reduciendo una importante fuente de presión para las empresas occidentales, la escasez de mano de obra está limitando la producción en países como Vietnam y Malasia. Además, las empresas de la región también tienen que hacer frente a los elevados fletes y a la escasez de materias primas. Todo ello se traduce en precios más altos y tiempos de espera más largos para los consumidores occidentales. En Vietnam, a las empresas les preocupa que los trabajadores migrantes que regresaron a sus aldeas rurales durante el apogeo de la pandemia sean menos propensos a volver a sus puestos de trabajo en las fábricas urbanas si la nueva variante provoca un nuevo aumento de los casos, o que el gobierno pueda endurecer las restricciones a los viajes internos.
En EE. UU. la Cámara de Representantes aprobó por abrumadora mayoría la Ley de Reforma del Transporte Marítimo de 2021 (OSRA). El proyecto de este modo pasó al Senado, donde además se prepara un proyecto de ley complementario que estaría pronto a presentarse. El proyecto normativo es de especial interés, ya que otorga a la Comisión Marítima Federal (FMC) la facultad de imponer requisitos mínimos a los contratos de servicios a las líneas navieras. Además, establece el cumplimiento del comercio exterior recíproco como parte de la misión de la FMC, incluyendo la obligación a las líneas navieras de no rechazar la carga de exportación si los contenedores pueden ser cargados de forma segura y en un plazo razonable. El legislador Dusty Johnson dijo que la crisis de la cadena de suministro ha puesto al descubierto muchas ineficiencias en el mercado actual, y con la ley hay oportunidad de resolverlas. Según las navieras el problema es que el proyecto de ley no está diseñado para arreglar la congestión de la cadena de suministro de extremo a extremo que el mundo está experimentando, y no va a arreglar ni puede arreglar esa congestión. Se debe seguir trabajando con el Congreso para buscar soluciones reales que fortalezcan aún más el sistema de transporte marítimo que ha apoyado a la economía estadounidense durante toda la pandemia.
En otro orden de cosas, según la consultora Alphaliner, el norte de Europa está sufriendo la omisión de 383 recaladas de principales servicios debido a la congestión portuaria. Existen varias razones por la que los puertos pierden recaladas: la omisión ad hoc de determinados puertos en itinerarios específicos para limitar los retrasos, la supresión (o transferencia) temporal de recaladas durante un determinado número de semanas para restablecer la fiabilidad de la programación y el elevado número de blank sailings. Felixstowe fue el más afectado por los cambios temporales de horario y los ajustes ad hoc. Los tres primeros puertos, Rotterdam, Amberes y Hamburgo, también sufrieron una reducción de entre el 20,2% y el 30,3% de las recaladas previstas. A los puertos más pequeños les ha ido mucho mejor.
Finalizando, la variante ómicron podría seguir causando problemas en las cadenas de suministro. Nuevas restricciones fronterizas, cierres de fábricas, bloqueos en puertos seguirán afectando el buen funcionamiento de la logística e impactando en las altas tarifas. Ante este escenario desafiante sugerimos realizar sus embarques con anticipación. No duden en consultarnos para encontrar juntos soluciones. ¡Estamos para ayudarlos!
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